Gabinete Sinapsis desarrolla a lo largo del año el “Programa de
intervención psicopedagógica para niños y adolescentes afectados por TDAH” cuya
finalidad es la mejora de las capacidades intelectuales básicas y a modificar
las funciones cognitivas deficientes en el afectado por TDAH.
Este programa tiene
como objetivo general prevenir y evitar el fracaso escolar, reducir los
síntomas de conducta, formar en estrategias educativas eficaces a través de un
apoyo de tareas de aprendizaje, además de fomentar un buen desarrollo personal.
Se define mediante actividades sobre las temáticas de sus propias asignaturas,
sobre mejora cognitiva que impliquen diferentes operaciones mentales y
desarrollo de sus capacidades.
Se emplea el método
socio-pedagógico de planificación colectiva para llevar a cabo un análisis y
evaluación de las necesidades y, una vez definidas, elaborar los programas de
intervención, estableciéndose así los principios generales y metodológicos
individuales para mejorar los niveles de eficacia.
Se aplica a niños de 5 a 17
años, distribuidos por edades, en un máximo de 3-4 niños por aula, según
necesidades. La asistencia es de uno o dos días a la semana según las
necesidades de cada niño y con una duración de una hora. Las actividades se
llevan a cabo en en el propio Gabinete.
El
tratamiento cognitivo-conductual desarrollado en fundación CADAH con los
afectados trabaja las siguientes áreas:
Problemas
específicos: Lectura, Escritura y Cálculo
Inicialmente se conoce su
estilo de aprendizaje, sus preferencias y motivaciones, para posteriormente
introducir elementos metodológicos que le faciliten su motivación hacia el
aprendizaje (dibujos, material manipulable, contenidos de su interés…). Mejorar
la capacidad de atención sostenida, selectiva y su capacidad cognitiva. Mejorar
los procesos básicos del aprendizaje: atención, comprensión, percepción y
memoria mediante el entrenamiento y la estimulación de las funciones
ejecutivas. Enseñándole a que revise sus trabajos antes de entregarlos para que
corrija los posibles errores y para estimularle positivamente si no los hubiera
y utilizando métodos que les permitan visualizar sus avances.
Socialización,
Competencia Social, Habilidades Sociales
Mejorar los problemas de
conducta y la adaptación de los niños al medio. Favorecer la adquisición de
conocimientos de hábitos y conductas, para aumentar el comportamiento apropiado
y disminuir el inapropiado, cambiar los antecedentes y las consecuencias para
que el comportamiento del niño cambie. Utilizando refuerzos positivo para
elogiar comportamientos que queremos que se den con mayor frecuencia.
Impulsando el bienestar psicofísico para que lleven una vida autónoma y
aumentar su participación en la vida social favoreciendo la integración y la
normalización. Entrenarles en el método IDEAR: Identificar el problema, Definir
el problema, Elaborar alternativas, Aplicar el plan diseñado y Reflexionar si
se ha logrado solucionar el problema y de no ser así que alternativa debemos
elegir.
Control de la
impulsividad, Reflexividad y Autocontrol
Trabajar la reflexividad y el
autocontrol ante las tareas escolares y aplicación de programas para el
desarrollo de éstas. Ayudar al niño a adquirir estrategias de tipo analítico
durante el proceso de aprendizaje a partir de: Dar importancia a la exactitud
en la solución de un problema mediante una explicación verbal detallada;
Mostrar al niño las pautas de comparación de cada uno de los aspectos de la
tarea; Entrenar el mantenimiento de la atención que requiere una exploración
detallada de la tarea; Ayudar a decidir cuándo es adecuado parar de procesar y
dar la solución correcta; Enseñar al niño a hablar con él mismo, a explicarse a
él mismo lo que está haciendo; Proporcionarle ayuda para que relacione las diferentes
características de los estímulos y utilice buenas estrategias de memoria;
Enseñar estrategias diferentes a un mismo problema con el fin de que aprenda a
generalizar a otras actividades y amplíe sus posibilidades de no cometer los
mismos errores.
Autocontrol de
emociones
Mejorar su autoconcepto, su
autoestima y sus desajustes emocionales. Proponerle tareas significativas que
lo motiven a buscar soluciones y que impliquen un desafío a su alcance y
ofrecerle un mayor grado de confianza. Ayudar al niño a hacer una valoración
más objetiva de sus errores sin hacerle sentir infravalorado y culpable.
Organización y uso
de la agenda
Asegurándose que el alumno ha
recibido las instrucciones de las tareas previstas; Entrenándoles en llevar el
material necesario a casa para realizar las tareas; Para que alumno y padres
tengan acceso a las fechas de exámenes con suficiente antelación, el contenido
que abarcará, las fechas previstas para la entrega de trabajos y lo que deberán
contener, así como los libros que deben leer y las fechas límite de entrega
para planificar los tiempos de estudio, la supervisión necesaria y con ello
conseguir una mejor organización en sus estudios. Entrenarles en mantener
rutinas, para conseguir que el alumno conozca que es lo que tiene que hacer en
cada momento y le ayude a sentirse seguro de modo que el modelo al que se
enfrente el niño cada día, sea lo más predecible posible. Recordarle, repetirle
y avanzarle las tareas a realizar o entregar según se vaya aproximando la
fecha; Ayudarle y enseñarle a confeccionar y utilizar calendarios con listas de
actividades, tareas y exámenes con pistas visuales para que puedan organizarse
mejor.
Técnicas de
estudio
Ejercitarles en una buena
actitud ante el estudio y planificación. Orientarles sobre la importancia del
lugar y el tiempo de estudio. Exponerles el alcance de mantener de forma optima
su material de estudio, sus deberes, apuntes y la preparación de los trabajos.
Entrenarles en la confección de las fases del estudio, lectura y subrayado. Adiestrarles
en la utilización de trucos para mejorar la memoria y las reglas nemotécnicas,
el uso del tiempo de estudio y descanso. Guiarles en la preparación y ejecución
de los exámenes, tanto escritos como orales. Educarles sobre la ejecución de
trabajos en grupo.